Post by Eidolon on Oct 19, 2021 14:38:47 GMT 1
En pocos días un clamor de noticias y rumores recorren a todas las gentes del Reino, desde aquellos en los campos clamando libertad como a los de los de ciudades y pueblos grandes temerososos de la ley y de sus superiores. Tanto en tabernas como posadas, tanto en las charlas de los mercados, familias en sus casas... algunos hablando con reverencia de forma privada y la mayoría susurrándolo con mucho miedo en sus voces...
De alguna forma de la cual no se comprende enteramente de que manera se dice que numerosos grupos de Libres, formadas supuestamente enteramente por dispersos grupos de campesinos furibundos, bandidos, saqueadores e incluso tribus bárbaras... han ido atacando en lugares muy precisos en momentos muy exactos a numerosas patrullas en caminos, carromatos escoltados e incluso fincas y villas vigiladas concretas a las afueras de algunas poblaciones por todo el Reino.
De alguna forma lo que son grupos inconexos, muchas veces hostiles entre sí mismos, supuestamente sin coordinación o comunicaciones generalizas por el Reino, simplemente consideradas masas alzadas en rabia sin entrenamiento militar o coordinación alguna, han conseguido dar una serie de golpes en menos de una semana siendo sus objetivos en todo momento la de empoderados mercaderes, terratenientes, hidalgos y cierto número de miembros de la nobleza menor junto con sus pequeños grupos de escoltas.
Estos ataques a lo largo de una semana en concreto se han saldado con la muerte de decenas de gentes de alta alcurnia y de importancia, aquellos que están por encima de plebeyos y labradores cubiertos en barro siendo asesinados, violados y desmembrados por turbas de inferiores. Para más preocupación estos ataques se dieron solamente en una serie de días concretos donde debido a ciertos ajustes y eventos entre la propia nobleza muchos de estos tuvieron que enviar representantes y miembros de sus casas a los caminos entre pueblos y ciudades.
Aunque no ha habido muertes ni ataques a nobles mayores de verdadera importancia o que sean altamente conocidos, esto no quita un ataque muy coordinado de aquellos que no deberían tener ni coordinación ni recursos para conseguir acabar con la vida de aquellos que están por encima de la plebe.
Algunos conspiracionistas comentan que varios de los muertos eran miembros de las casas nobles recientemente deshauciadas en el ajuste final de poderes aunque otros rebutan sus teorías indicando que aquellos caídos en desgracia se pusieron mucho más en movimiento y tuvieron menos recursos restantes lo cual les hicieron mucho más vulnerables, añadiendo a una larga lista de mensajeros, comerciantes y algunos pequeños nobles caídos no pertenecientes a las casas nobles recién caídas.
La oleada de indignación y furia que posteriormente recorrió a las familias nobles del Reino han provocado que, aparte de ejercerse algunas ejecuciones públicas en ciertos feudos de siervos que se consideraban de desconfianza bajo la mirada y el silencio de las masas, se provocara una oleada de ultraje y reclamaciones en la Corte del Reino para aplastar definitivamente y de inmediato a absolutamente todos los Libres aunque implicara "exterminar sin excepción a todos y cada uno de los campesinos rebeldes piojosos llenos de fango que pueblan los campos del Reino si hace falta".
Ante estas exclamaciones el Concejo del Trono ha recordado que aunque las ciudades y pueblos están bajo control, la raiz del asunto está en las competentes manos de los Héroes del Reino y Protectores de la Civilización, concretamente tales esfuerzos centrados por Lord Bennett Reinhardt, el purgador de Rym, el cual se está encargando personalmente del asunto. Este recordatorio ha desviado la intensa mirada de toda la nobleza del Reino, algunos dirían que con ojos inyectados en sangre, directamente hacia el mencionado Bennett a la espera de prontos resultados de este para solucionar el conflicto que, ahora si, la nobleza cree que puede afectarlos.
De alguna forma de la cual no se comprende enteramente de que manera se dice que numerosos grupos de Libres, formadas supuestamente enteramente por dispersos grupos de campesinos furibundos, bandidos, saqueadores e incluso tribus bárbaras... han ido atacando en lugares muy precisos en momentos muy exactos a numerosas patrullas en caminos, carromatos escoltados e incluso fincas y villas vigiladas concretas a las afueras de algunas poblaciones por todo el Reino.
De alguna forma lo que son grupos inconexos, muchas veces hostiles entre sí mismos, supuestamente sin coordinación o comunicaciones generalizas por el Reino, simplemente consideradas masas alzadas en rabia sin entrenamiento militar o coordinación alguna, han conseguido dar una serie de golpes en menos de una semana siendo sus objetivos en todo momento la de empoderados mercaderes, terratenientes, hidalgos y cierto número de miembros de la nobleza menor junto con sus pequeños grupos de escoltas.
Estos ataques a lo largo de una semana en concreto se han saldado con la muerte de decenas de gentes de alta alcurnia y de importancia, aquellos que están por encima de plebeyos y labradores cubiertos en barro siendo asesinados, violados y desmembrados por turbas de inferiores. Para más preocupación estos ataques se dieron solamente en una serie de días concretos donde debido a ciertos ajustes y eventos entre la propia nobleza muchos de estos tuvieron que enviar representantes y miembros de sus casas a los caminos entre pueblos y ciudades.
Aunque no ha habido muertes ni ataques a nobles mayores de verdadera importancia o que sean altamente conocidos, esto no quita un ataque muy coordinado de aquellos que no deberían tener ni coordinación ni recursos para conseguir acabar con la vida de aquellos que están por encima de la plebe.
Algunos conspiracionistas comentan que varios de los muertos eran miembros de las casas nobles recientemente deshauciadas en el ajuste final de poderes aunque otros rebutan sus teorías indicando que aquellos caídos en desgracia se pusieron mucho más en movimiento y tuvieron menos recursos restantes lo cual les hicieron mucho más vulnerables, añadiendo a una larga lista de mensajeros, comerciantes y algunos pequeños nobles caídos no pertenecientes a las casas nobles recién caídas.
La oleada de indignación y furia que posteriormente recorrió a las familias nobles del Reino han provocado que, aparte de ejercerse algunas ejecuciones públicas en ciertos feudos de siervos que se consideraban de desconfianza bajo la mirada y el silencio de las masas, se provocara una oleada de ultraje y reclamaciones en la Corte del Reino para aplastar definitivamente y de inmediato a absolutamente todos los Libres aunque implicara "exterminar sin excepción a todos y cada uno de los campesinos rebeldes piojosos llenos de fango que pueblan los campos del Reino si hace falta".
Ante estas exclamaciones el Concejo del Trono ha recordado que aunque las ciudades y pueblos están bajo control, la raiz del asunto está en las competentes manos de los Héroes del Reino y Protectores de la Civilización, concretamente tales esfuerzos centrados por Lord Bennett Reinhardt, el purgador de Rym, el cual se está encargando personalmente del asunto. Este recordatorio ha desviado la intensa mirada de toda la nobleza del Reino, algunos dirían que con ojos inyectados en sangre, directamente hacia el mencionado Bennett a la espera de prontos resultados de este para solucionar el conflicto que, ahora si, la nobleza cree que puede afectarlos.