Es bien sabido que en los orígenes de Bayas Rathu, la presencia de los Tel'Quessir fue el primer paso del pilar de la civilización de la actual ciudad anexada al yugo del Reino. De entre todas las familias antiguas que conformaron la primera alianza, el consejo del Bayas, la Casa Gonsadel, una antigua dinastía de elfos fue la más aclamada y querida. Hoy por hoy y bajo la indiferencia de las Cortes Humanas, y el desánimo de los Elfos, parece guardar silencio al presente y a las telarañas políticas.

No obstante, lo que nadie puede discutir es su presencia, eterna en los barrios altos y cuya hacienda recuerda a cada viajero, espectador y visitante la gloria ancestral de los elfos. Incluso en el inmovilismo de los mismos, la presencia de los cambios en estos años no ha pasado desapercibida, llegando a los oídos de Adrassil Gonsadel, bendecido como Ary entre los Tel'Quessir y primero entre los Gonsadel, que entre los Reinos de las razas jóvenes hay miembros de su raza capaces de ser reconocidos por sus gestas y hazañas, creando expectación e interés.

Tiempo después, Eliandor Asdrolendel interesado años atrás hacia el favor de los Gonsadel es correspondido, siendo entregada una misiva cuando este pasa dias afables próximo en la Peninsula, por un extraño ave, cuyo plumaje y forma parece ser una encarnación de diferentes fuerzas; cristal, luz y plumaje.