Que hacer?:
A este punto no es que pueda hacer muchos preparativos pre-escena, lo más que puedo hacer es meramente recuperar material, municion y tralla dentro de lo que me permite el lapsus de tiempo y acompañar a Benancio Prime en sus viajes para vigilarle el puto culo...

LUAL-THYR – VICTORIA AJUSTADA Y TERRIBLES REVELACIONES



Tras los eventos de marchas de días atrás y eventos de batalla suprema de destrucción contra uno de los nodos principales de la horda situada más al sur, los Heroes del Reino y los aventureros que los acompañaban surcaron a toda velocidad los cielos por el uso de cierto rezo de poder clerical... al parecer usado en el pasado por parte de ciertos individuos en lejanos desiertos debido a historias lejanas a los sucesos actuales.

Sin descanso alguno, apenas una hora después los Heroes llegaban a su nuevo destino planificado previamente con el ejercito de la Ultima Marcha, lo que fue antes la población de Koltern. Sin embargo cuando las figuras hecha viento del grupo iban aterrizando y haciéndose materia, estos vieron que tal y como los conjuros de recado habían indicado el puente principal del pueblo había sido destruido, pero un segundo puente de madera improvisada permanecía y cercano a el justo fuera de la población en vez del ejército había apenas un muy pequeño grupo de escoltas soldados liderados por Cypherius. Estos luchaban con numerosos cadáveres trasgoides ya fallecidos alrededor mientras un continuo goteo de orcos seguían atacándoles y poco a poco aplastando al grupo de soldados y milicianos que luchaban junto al semielfo guerrero.

Los Héroes volaron el puente de madera mientras aparecieron y aniquilaron con rapidez a los pocos orcos que quedaban con vida al otro lado del río. Cuando estos llegaron y consiguieron intervenir por desgracia solo quedaban con vida el propio Cypherius y una hábil luchadora elfa llamada Alana, una mensajera enviada por parte de la archimaga de Bayas-Rathu que había elegido quedarse y ayudar en las imposibles luchas del sur como muestra de apoyo de la norteña ciudad hacia el resto del Reino.

Mientras los reunidos se ponían a cubierto llovieron por parte del enemigo; flechas, saetas, conjuros explosivos, rayos e incluso algunos orcos transportados por magia desde el otro lado del río… mientras tanto los aventureros devolvían proyectiles y conjuros hacia el enemigo, los presentes hicieron sus presentaciones y el grupo fue puesto al día de los diferentes eventos ocurridos últimamente.

En lo que había tomado a los Heroes del Reino destruir el gran grupo de trasgoides masificados de Guitor, el millar de hombres que representaba la última tropa improvisada del Reino, liderados por el grupo de aventureros de Cyherius, había conseguido cortar el paso a este otro núcleo grande volando en pedazos el puente pero al parecer al poco recibieron noticias del desparramiento de incursores y bandas hacia el este por el resto del Ducado incluyendo en la región de Lual-Rhus. Al parecer los trasgoides estaban tomando numerosos prisioneros con vida de vuelta a este lugar y confiando en el poder del grupo el semielfo hizo una última arriesgada apuesta. Partió los supervivientes de las tropas en 3 columnas lideradas por sus compañeros de grupo y las mandó a perseguir y erradicar bandas trasgoides dispersadas por todas las regiones hacia el este en un intento de disminuir números de incursores y mitigar daños mientras los héroes se encargaran de la base principal trasgoide restante de la región de Lual-Thyr.

Sin embargo mientras los Héroes aún estaban de camino Cypherius vio un grupo de prisioneros siendo traidos hacia el pueblo y este decidió atacar a los trasgoides que los tenían capturados antes de que entraran en el pueblo. Dichas victimas fueron liberadas y pudieron huir pero a costa de que Cypherius y su pequeño grupo de escolta tuviera que pagar el precio con muchas de sus vidas para hacer ganar tiempo a los prisioneros liberados de que se alejaran del sitio. Se manifestó pues que la pronta llegada de los Heroes fue verdaderamente una intervención afortunada.

Explicada la situación y siempre bajo ataques esporádicos desde el otro lado del río por parte de más proyectiles, más bolas de fuego, mas rayos y mas trasgoides que se las apañaban para usar conjuros que los trasladaban cerca del grupo, los ahora presentes; Bennett, Zurich, Krisleth, Alant, Aldo, Alana y Cypherius buscaron como atravesar ahora el río ellos mismos para atacar el pueblo y ver si conseguían ahora no solo aplastar el último núcleo mayor de trasgoides de la región sino además encontrar más prisioneros en su interior para liberar.

El cruce del río no fue sencillo al estar el grupo bajo ataque continuado pero ciertos rezos de poder de mover aguas y alzar piedra para formar un tramo pasable pareció bastar pese a las flechas y disipaciones mágicas que llovían desde el otro lado. Una vez Krisleth consiguió pasar llevando una cuerda atada a su cintura el resto del grupo con un suelo bajo el agua a pisar y cuerdas a agarrar consiguieron con éxito atravesar dicho caudaloso río, con algunos miembros del grupo usando poderes mágicos para nadar o caminar por el fondo del mismo. Al poco de conseguirse el cruce el heroico grupo se sumió en una terrible y continuada lucha brutal contra innumerables trasgoides de alto poder.

Como en el otro pueblo el combate aquí vivido fue masivo, brutal, largo, apocalíptico… con algunas diferencias. Esta horda usaba la brutalidad de números pero también había una mucha mayor presencia de arcanos y chamanes entre los trasgoides. Esto se notaba en varios aspectos en la batalla que hubo entre las casas del pueblo de gran tamaño. Además de masas de bárbaros orcos, guerreros osgos, tiradores kobolds, asesinos trasgos y chamanes que disparaban rayos, bolas de fuego, disipaciones mágicas sin cesar… otros tipos de criaturas empezaron a hacer aparición cada vez en mayor número como horrendos refuerzos de la horda.

Muchos asesinos trasgoides especiales y sobre todo chamanes empezaron a usar los cuerpos caídos de sus compañeros para alzar sombras oscuras que se lanzaban contra el grupo, fue solo el hecho de que Bennett poseía poderes de anti engendramiento remanentes de la batalla contra la necrópolis que no tuvo que ver como algunos de sus compañeros caídos no quedaban perdidos para siempre al ser alzados como sombras y pudo revivirlos en pleno combate con éxito. Pese a todo la brutalidad de los chamanes trasgoides entre las masas bárbaras aparentemente infinitas eran de notar.. no solo en la lluvia de hechizos sino en los enjambres de sombras que surgían, ahogados que salían del río, basiliscos que eran soltados entre manadas de jinetes huargos, masas de crias de engendros aberrantes, más engendros aberrantes Otyughs adultos de enorme tamaño de multiples tentáculos y bocas, cucarachas gigantes bersérker emanando auras de veneno, arañas gigantes hechas de huesos y un sinfín de masas de engendros horrendos sin nombre que asistían como continuados refuerzos a los innumerales masas de trasgoides de alto poder que atacaban a los héroes una y otra vez en una pesadilla incluso mayor que la anterior batalla si eso fuera posible.

El paso de las horas mostraba un asedio incansable a los seres trasgoides sin importarles al parecer cuantos cientos y miles de estos seres iban siendo asesinados y aplastados por la formación y filas d ellos héroes. No había paradas de descanso, no había respiro, solo oleada tras oleada de seres que venían de las afueras del pueblo inundando las calles y monstruosidades que salian de las casas conforme estas explotaban al salir extrañas criaturas a través de sus paredes. Al final sobre literalmente una montaña de enemigos muertos alrededor de un cadalso de ejecución los Héroes del reino prestaron batalla en el centro del pueblo a una locura y demencia de seres conforme cientos y miles seguían acudiendo a luchar y morir. No solo acudían sin parar orcos bárbaros, también ogros luchadores veteranos, osgos de élite entre las masas de osgos veteranas, más engendros, mas chamanes.. formando combinaciones infinitas que no acababan jamás.

Cuando las montañas de cadáveres eran ya casi más altas que la plataforma del cadalso algo sucedió que casi aniquiló a los Héroes pese a sus desmanes, pese al poder de estos, pese a sus pergaminos siendo usados, pese a sus ristras de objetos mágicos quemados, pese a sus pérfidas estrategias grupales, pese a la enorme habilidad de Cypherius de lucha y absorver golpes, pese a los rezos de Bennett, pese a las mortales flechas de Zurick, pese a las flechas de Krisleth, pese a las distracciones de Alant y Aldo confundiendo al enemigo, pese a las curaciones sucesivas desde las sombras de Alana…. Pese a todo algo iba a aniquilarlos al final de todo.

Un conjunto de nefandas luces de color verde disformidad se encendieron alrededor de la batalla iluminando los MILES de cadáveres de seres de poder allí erradicados… una enorme masa de nigromancia chamánica fue usada. Objetos de poder trasgoides fueron consumidos y en disposición de estrella de Ocho Puntas la llamada a los Ocho Avatáres de las Sombras del Destruido Mundo-Reino Trasgoide de Kragnaroth fueron llamados.

El grupo de Héroes viendo las luces de verde disformidad de INMEDIATO marcharon de la plaza en la que llevaban horas luchando y corrieron a refugiarse tras un edificio del borde de esa misma plaza, lamentablemente deberían haber huido mucho más lejos que eso…. Ya que de las luces se alzaron 8 NOCTAMBULOS que de inmediato convocaron sus propios siervos letales esqueléticos y en masa se lanzaron tras los dos lados del edificio donde los Heroes intentaban refugiarse y esconderse.

La carnicería de conjuros absorvedores de esencias y golpes de las Entidades de Poder Sombrias pronto rompieron la moral del grupo para irlos derribando y eliminando en poco tiempo a todos ellos además de dejarlos anulados y muertos. Sin embargo aunque por poco, esto no fue el final del grupo. Mientras un desesperado y muy malherido Cypherius intentó llamar la atención con éxito de la mayoría de poderosos seres y huyo arrastrando a estos tras de sí… los conjuros de resguardos y contingencias realizados por Bennett se activaron en el último segundo impidiendo la muerte de los siervos de la casa Reinhardt… no de todos los aventureros pero si de algunos de los más poderosos.

Reincorporándose estos a duras penas y enfrentándose ahora a primero una y después a dos Noctámbulos al mismo tiempo junto a los siervos esqueletos de estos… de forma agónica los Héroes se impusieron mientras otros Noctámbulos, esqueletos y restos de grupos trasgoides seguían goteando y llegando al nuevo lugar de combate tras los edificios.

Tomo un tiempo pero con Cypherius gastando todos sus artículos de poder, pociones especiales, resguardos personales y con la suerte de los dioses sonriéndole ese día.. el semielfo pudo descansar cuando los últimos seres de poder que le perseguían iban siendo abatidos poco a poco por sus compañeros de batalla.

Sin embargo el descanso duró poco, pues con los Héroes habiendo gastado sus resguardos y contingencias de emergencia pudieron escuchar los gritos de una última y brutal oleada trasgoide dirigida por un esquivo trasgo y un enorme y poderoso cíclope atestado de objetos que le hinchaban en poder y brutalidad.

La última contienda y los golpes finales fueron repartidos… y mientras el poderoso y dificil de matar cíclope daba órdenes una serie de flechas furtivas finalmente se clavaron en su cerebro atravesando su enorme ojo haciendo que el líder de esta horda cayera muerto al suelo. Dicha muerte terminó espantando los restos de oleadas de numerosos trasgoides que aún quedaban y estos se dispersaron huyendo sobre todo hacia el norte…

Victoria al final aunque por poco. Los cansados Héroes contemplaban la manta infinita de cadáveres que se alejaban en todas las direcciones del horizonte y emplearon el descanso para realizar conjuros que permitieran revelar la localización de prisioneros supervivientes. Mientras algunos miembros del grupo encontraban y exterminaban aberraciones restantes ocultas en diversos lugares del pueblo, la mayoría de los Heroes encontraron supervivientes en un templo no lejos del centro del pueblo. Sin embargo lo allí revelado cambió todo el panorama de la guerra entera y de la destrucción de la península.

En el interior de lo que fue un templo.. distribuidos por suelos, paredes y techo habían docenas de personas capturadas pegadas con algún tipo de limo viscoso y sus figuras estaban deformadas por la presencia de decenas de viscosos huevos semitransparentes que sobresalían de la piel de cada una de estas victimas por todos sus cuerpos. La horrenda y atónita visión empeoró aún más cuando al intentar Bennett aliviar los claros gestos de dolor y sufrimiento de dichas victimas apelando a poderes de restauración y sanación… esto en vez de ayudarlas empeoró el dolor de estas cuando los huevos que llevaban parecían como respuesta madurar más rápidamente llegando a eclosionar varias de ellas….

De los huevos eclosionados salían crías de abominaciones como las miles con las que antes habían luchado en las calles del pueblo señalando oscuras revelaciones por dicho hecho. Una vez se eliminaron prontamente dichos monstruos… Cypherius señaló varias victimas que aún no estaban contaminadas, apenas menos de una decena las cuales fueron sacadas del lugar. Tristemente se llegó a la conclusión de que lo mejor que podía hacerse era incinerar el edificio con el resto de victimas en su interior y asegurar una purga de los horrores hallados. Mientras Alant y Krisleth se alejaron tras dar muerte violenta personal a varias de estas victimas, todo fue finalmente incinerado por las llamas tras prender el edificio y el grupo se alejo de las llamas humeantes para deliberar sobre estos acontecimientos.

Tras liberar los prisioneros, no sin antes usar poderes curativos en ellos para ver si estaban infectados o no y hablar con ellos para ver que sabían, se descubrió sobre la inferencia de ciertos raros seres que parecían estar realmente al control de la horda. El Iluminado parecía quedar meramente como un a marioneta figurativa de lo que realmente estaba pasando. Se habló de la presencia de extraños enanos y elfos de pieles oscuras, seres orbes con muchos ojos y alguna clase de ser raro con cabeza de pulpo dirigiendo por encima de todos ellos.

Tras determinarse que estos pocos prisioneros restantes no estaban infectados, repartirles oro y articulos de los trasgoides muertos y señalarles un lugar más seguro entre algunas de las aldeas deshabitadas más al sur, los Héroes del Reino marcharon para reequiparse y prepararse para el siguiente paso una vez avisaran antes a todas las autoridades y arcanos posibles en el frente de la guerra de lo allí descubierto. Mientras tanto Cypherius se mantendría en el frente coordinando las tres falanges de la Ultima Marcha para intentar dar caza y hostigar a todos los trasgoides rezagados y dispersos posibles para irlos empujando hacia el norte y posteriormente reordenar hombres supervivientes más al norte, al borde del Ducado de Augusto una vez se despejara un poco más los alrededores en los siguientes días. Sería en una semana cuando los Heroes volverían y se dispondrían a intentar ayudar en lo posible a la tomada región de Augusto para ir abriendo un camino poco a poco hacia su sitiada ciudad aprovechando que Bayas-Rathu aún no había caído y la horda principal seguía distraida en el norte.

Mientras el grupo de Cypherius y las escasas tropas de la Ultima Marcha iban hostigando rezagados goblinoides y pequeñas bandas trasgoides para luego reposicionarse para el siguiente precario intento en la frontera del Ducado de Augusto, los Heroes volvieron a la capital del Reino ahora que la región empezaba a despejarse, pero no hubo tiempo para celebraciones. Las importantes y tenebrosas noticias del descubrimiento de refugiados infectados por abominaciones a punto de eclosionar fueron transmitidas a las autoridades en la capital y casi al mismo tiempo a través de recados y mensajes a las diferentes líderes en las diferentes ciudades del Reino.

En la capital donde las noticias llegaron algo antes, los misteriosos medios y recursos personales de la corona y de la Reina que al parecer seguía en la ciudad, fueron puestos en servicio de dicha emergencia. La alarma y la alerta por la inmensa cantidad de refugiados en la bulliciosa ciudad fueron máximas una vez se confirmó la fuente de las noticias como por parte de los Protectores de la Civilización. Aunque de primeras la titánica tarea de localizar, contabilizar y aislar de inmediato a la inmensa mayoría o totalidad de los refugiados llegados en los últimos meses que se hacinaban en los distritos menos favorecidos de la ciudad parecía imposible… algo ocurrió superando las más alocadas de las imaginaciones o demencias.

Apenas un día después de la llegada de los mensajes y noticias de alarma por parte de las fuentes verídicas... una serie de cánticos mágicos fueron inundando las calles de la ciudad. Poderosas odas y ecos musicales recorrían calles, casas, comercios, parques y vías. Dicha maravilla milagrosa sería llamada en los anales de la historia como “El Día del Cántico de la Purga” ya que por cada calle que las odas musicales inundaban las casas.. todos los habitantes de dicha calle salían tarareando como si sus mentes no estuvieran del todo en el lugar. Las diferentes filas y ristras de ciudadanos iban tarareando y a veces incluso bailando al son de la música en un tenebroso y asombroso desfile que duró desde el amanecer hasta la puesta de sol conforme la totalidad de las gentes de cada calle y barrio iban en procesión realizando un desfile que los llevaba a los jardines de palacio, donde llegaban a una zona de bailes.. en dicho lugar a cada grupo se les llenaba de bendiciones musicales de curación y bendición. De entre cada gran grupo de gentes casi siempre había unos pocos que reaccionaban mal a esto… y mientras las masas de las gentes en sus cantos y bailes ni siquiera parecían darse cuenta o prestar atención… los que reaccionaban mal a la música caminaban o se arrastraban con dificultad a unas zanjas dispuestas donde mientras se tiraban voluntariamente dentro… grupos armados de soldados y caballeros del Reino iban procediendo a echar aceite y prender fuego a aquellos que se arrojaban a dichas fosas crematorias.

Pese a lo mórbido y horroroso de la solución, la inmensa mayor parte de la población de la ciudad iba despertando al día siguiente de sus cantos y bailes sin apenas recordar lo ocurrido y recordando de forma solo borrosa a quienes ahora estaban ausentes. Entre los grupos de refugiados que temporalmente moraban por la ciudad faltaban muchas personas de todas las edades pero habían muchos más que permanecían y que podían cuidar de aquellos que perdieron familiares.

Pese al horror muchísimos más habían sido salvados y la ciudad no sería sometida a una destrucción imprevista. Aunque hubo algunos caballeros del Reino que recordarían con dolor lo que se tuvo que hacer, estos sabían que tuvieron que cumplir con su obligación y su honor en nombre del Reino para sacrificando algunos salvar a muchos más. Las gentes de la ciudad por suerte no recordarían gran cosa aunque luego se oyeron los rumores de como gentes infectadas con monstruosidades fueron apartadas de los demás.

BAYAS-RATHU – EL EMBATE DE LA HORDA



Mientras en el sur apenas se empezaba a revelar los nuevos e inminentes horrores... en Bayas-Rathu unos pocos días después del primer intento de ataque y con más trasgoides que acudían en masa a las lineas que asediaban la ciudad el verdadero ataque no se dejó esperar mucho tiempo. El verdadero asalto de la Horda con intención de verdaderamente tomar y aplastar la ciudad empezó por fin tras días y días de escaramuzas y asaltos menores previos.

En previsión a esto por decisión de la Casa Gonsadel todos los refugiados y civiles que residían en toda la zona entre la muralla interior y exterior de la ciudad fueron trasladados en la zona interior, aunque esto resultaba en una masificación terrible de calles y edificios, con tiendas de campaña de trasladados llenando cada calle de la zona interior de la ciudad e incluso impidiendo el fácil movimiento en la parte más central de la urbe, al menos la gente podía estar algo más tranquila durante un tiempo. Con los defensores de la ciudad situados en las murallas exteriores e interiores y las calles barricadas la gente estaba al menos de momento lo más protegida que se pudo.

Se rumoreaba también que nuevos conjuros defensivos estaban siendo usados por diferentes arcanos de la ciudad, incluyendo la archimaga de BayasRathu, sobre la muralla interior por si se daba el peor de los casos y se desplegaron todos los activos y conjuros posibles en el lugar.

Dichas previsiones necesarias y acertadas para proteger a la población fueron concluidas justo cuando a mediados de la segunda semana de asedio un asalto verdaderamente grande y masivo de los trasgoides se produjo contra las murallas exteriores de toda la ciudad a un mismo tiempo proveniente dicho ataque simplemente de todas las direcciones.

En esta ocasión lo que se lanzó contra las defensas de la ciudad no era un mero asalto de unos pocos miles de trasgoides sino una masa total que lo cubría todo en kilómetros a la redonda. Se cree que más de diez mil de estos seres en total, puede que incluso más, participaron en asegurar la destrucción de la urbe. Desde luego la masa que llegó contra las ciudad recibió los saetazos de los defensores que disparaban de forma sincronizada y sin dar cuartel mientras decenas y cientos de criaturas caían muertas aunque estas llegaban directamente a las murallas sin ni siquiera aflojar el paso.

Numerosos héroes tomaron parte en la lucha por la ciudad desde el comienzo del asalto, incluyendo según se rumoreó a la mismísima Archimaga de la ciudad junto al Archiduque de Augusto cerca de la puerta exterior norte, el flanco más vulnerable de la ciudad, los cuales combinaban sus capacidades de forma sorprendente para hacer pedazos a todo ser hostil que osaba acercarse a ellos no importando el paso de las horas y días. También se dijo que el Sumo Sacerdote de Wee-Jaas acompañado por el nuevo capitán de la guardia lucharon en persona en el flanco oeste, el lado más castigado por el ataque, creando un bastión y puntal defensivo infranqueable de forma continuada en toda la batalla. Finalmente se dice que el Héroe del Reino Eliandor, junto a sus compañeros Iseldur, Elvenar y Aramil pese a estar situados en el flanco este de la ciudad fueron partícipes de los combates más largos y desgastadores de la contienda.

Mientras tanto en un principio y por todos los flancos de la ciudad las masas trasgoides empezaban a apilarse contra el anillo de murallas exteriores sin importarles las terribles bajas que sufrían en el proceso. Mientras numerosos trasgoides usaban sus propias armas de distancia para disparar en respuesta de las masas de flechas de los defensores, otros atacantes recurrían a sus escudos y los cuerpos de sus compañeros caídos para ir creando núcleos de apilamiento de seres junto a las murallas, colocar ganchos y pinchos por las partes bajas de las paredes de la ciudad e incluso empezar a formar pendientes de escaleras hechas de cuerpos y cadáveres. Toscas armas de asedio en grandes números se revelaron por todas las líneas de asedio por partes de los atacantes y numerosos virotes gigantes y proyectiles de catapultas en llamas comenzaron a caer por murallas y casas llevándose a algunos soldados en el proceso. La ciudad respondió con sus armas de asedio y creó grandes dolores y destrucción a las primeras oleadas de atacantes mientras tanto.

Este combate de destrucción fuera de las murallas duró al menos una hora, creando un nuevo mar de cuerpos destrozados y saeteados mientras numerosos Héroes y defensores disparaban flechas, frascos de ácidos, vaciaban varas de magias de bolas de fuego, rayos, e incluso se usaban algunos pergaminos de altísimo poder para hacer llover meteoros del cielo que caían contra algunas torres de asedio y masas de desafortunados trasgoides.

Sin embargo parecía que la horda atacante estaba dispuesta a absorver numerosas bajas de los trasgoides más débiles que eran usados sin miramientos como tareas de pantalla con tal de preparar el camino a la invasión ya que con el sonido de cuernos procedentes de detras de sus filas, todos los trasgoides apilados en las murallas que seguían con vida se lanzaron de alguna forma hacia arriba, entre cuerpos apilados, estacas colocadas, escalas puestas, toscas escaleras e ignotas magias y poderes un manto de muerte y destrucción se alzaba por las murallas para llegar a lo alto de estas.

La lucha se volvió cruenta para los defensores de la muralla exterior cuando las criaturas llegaron al combate cuerpo a cuerpo. Pese a la valiente lucha de los soldados y guardias apostados en el lugar los trasgoides rápidamente superaron en número a estos y en poco tiempo empezaron a superar a estos por toda la muralla exterior donde no se encontraban Héroes o Grandes Luchadores distribuidos. Aunque en unos pocos focos de defensa, excepcionales luchadores, arcanos y héroes lanzaban podres destructivos y usaban elementales para seguir barriendo trasgoides fuera de las murallas en el resto de ellas estas fueron rápidamente tomadas y los trasgoides no perdieron tiempo en bajar y lanzarse a las calles y barricadas del interior de la ciudad.

La masa de pantalla desechable trasgoide se abrió paso en las calles con las murallas despejadas, incluso los Héroes por no verse rodeados debieron retroceder también a las lineas de barricadas interiores y aunque en las calles esta primera oleada trasgoide fue fácilmente parada pese a sus números esto prontamente cambiaría. Cumplida su tarea los trasgos más débiles abrieron paso a las tropas frescas veteranas y endurecidas que solo tuvieron que llegar por uso de poderes o torres de asedio recién llegadas y verterse estas en masa en las calles de la ciudad.

A excepción de algunos focos defensivos específicos en unos pocos puntos de la ciudad la nueva oleada de trasgoides de gran poder se abrió paso por lineas de barricadas y soldados en las calles como si un cuchillo caliente estuviera atravesando mantequilla. Los defensores lucharon con valor y decisión usando cuellos de botella en las calles, barricadas y todo tipo de armas pero esto apenas conseguía frenar un poco la velocidad de invasión de los brutales trasgoides veteranos que parecían babear y gritar con ojos inyectados en furia mientras iban haciéndolo todo pedazos con sus armas a dos manos.

De los ocho barrios periféricos que habían entre las murallas exteriores e interiores, la mitad de ellos fueron aplastados en pocas horas. Con todas las barricadas atravesadas y calles invadidas hasta casi las murallas interiores en numerosos lugares siendo la otra mitad de barrios también atacados pero con formaciones de defensores que no terminaban por ceder sus posiciones. Algunas de ellas debido a la intervención directa en combate de legendarios luchadores y arcanos, como la archimaga de la ciudad junto al archiduque de Augusto, el nuevo capitán de la guardia junto al primero de Wee-Jaas y el Héroe Eliandor y sus compañeros.

Se dice que durante estas horas de lizas desesperadas de retroceso en las calles se vio a los cuatro rumoreados jinetes apocalipticos pasando por los cielos en el exterior de la ciudad en increiíblemente veloces pasadas aéreas descargando inmensas cantidades de conjuros destructivos sobre las tropas de reserva que seguían empujando hacia el interior de la ciudad.. antes de finalmente desaparecer de nuevo en los dichos cielos antes de que fueran derribados por conjuros y contraconjuros de los numerosos chamanes de la horda.

Mientras tanto en los barrios, el grupo de Eliandor apenas tuvieron respiro. Habían estado participando en la lucha desde el comienzo en las murallas exteriores masacrando cuanto trasgo alcazaron a ver y habían sido uno de los pocos grupos que pudieron retroceder con vida desde allí. A continuación tuvieron que retroceder por las calles de abajo cuando los trasgoides veteranos se abrieron paso.. dañando, matando y retrasando a tantos goblinoides endurecidos pudieron conforme sus barricadas de aliados eran sobrepasadas por todas las calles cercanas. Muchos orcos hacían pedazos las barricadas mientras cargaban con sus hachas sin importarles que unos pocos quedaran empalados en ellas, numerosos chamanes disparaban bolas de fuego y rayos a los defensores en las distancias y especializados asesinos trasgos correteaban disparando sin cesar desde los techos de las casas que iban siendo ocupadas.

En la difícil retirada de barricada en barricada se perdió contacto con Isendur al cual se le vió por última vez con vida disparando sin parar desde lo alto de una torre en un edificio mientras oleadas de trasgoides se le echaban encima saltando desde tejados cercanos. Finalmente acorralados el resto del grupo con todas las barricadas de su zona caída y todos los defensores muertos a su alrededor, los tres elfos que quedaban en pie era lo único que luchaba y se resistía unos minutos finales en uno de los barrios caídos y tomados.

Al poco y ya desesperados mientras Elenvar intentaba huir corriendo por los callejones atestados de trasgoides y desapareciendo para no volver a ser visto con vida, Eliandor tomo el cuerpo del ahora recién caído Aramil con algún conjuro telekinetico y abrazándole intentó retirarse al anillo interior de la ciudad a través de un conjuro de teleportación mientras los trasgoides intentaban acabar con el. Sin embargo pese a ser el punto de destino de transporte arcano un lugar familiar los dioses del Seldarine no parecieron estar de acuerdo con tal acción ya que la teleportación por alguna razón falló y tanto Eliandor como el caído Aramil aparecieron en alguna calle de algún barrio del anillo exterior de la ciudad, con el sonido de batalla y lucha por los alrededores.

Mientras el arcano usaba una gema de Tandrake para devolver a la vida a su compañero elfo y este se tomaba una poderosa poción para sanar sus heridas, grupos de trasgoides dispersos localizaron al dúo y estos tuvieron que usar seres convocados para hacerse paso ahora en movimiento y huida por las calles de la zona.

Con la permanente guía del oculto familiar del arcano en los cielos del campo de batalla, los dos elfos restantes se abrieron paso a golpe de espada y hechizo por las calles mientras se frenaba a sus perseguidores con más magia para finalmente llegar el dúo al punto de defensa de la puerta sur que daba al anillo interior de la ciudad. El lugar aún era defendido obstinadamente por numerosos soldados que se negaban a ceder su zona defensiva alrededor de la ahora cerrada y sellada puerta que daba al interior de la ciudad. Este grupo de defensores estaba además apoyado por las flechas que caían desde lo alto de la muralla interior que ayudaban a seguir frenando el implacable avance trasgoide.

La llegada de los dos elfos al lugar, aunque perseguidos por trasgoides, terminó por inclinar la balanza a favor de los defensores cuando el arcano despertó a los Ents situados por el lugar previamente a la batalla que estaban convenientemente dispuestos cerca de ese punto defensivo vital. Con la ayuda de varios poderosos Ents, los dos elfos y los defensores los grupos ahora más dispersos de trasgoides que acudían al lugar fueron totalmente aplastados y rechazados, consiguiéndose un momentáneo punto de calma en el lugar.

En esos momentos por toda la ciudad pareciera que finalmente los desgastes previos tras la muerte de numerosísimos defensores, el tamaño y amplitud de la ciudad, además de los desgastes que ciertos grupos especiales de defensores estaban haciendo, los bombardeos de los jinetes del apocalipsis y otros eventos hicieron que la llegada de la horda a la muralla interior no tuviera la suficiente fuerza como para sobrepasarla. No hay duda de que hubo luchas y muerte en la batalla por la muralla interior en el empuje brutal de la horda pero las defensas reforzadas de defensores que se concentraban en el lugar y los desgastes anteriores consiguieron que finalmente el empuje o momentum de la horda atacante fuera disminuyendo hasta que finalmente se convirtió en una batalla estanca de varios barrios machacados pero con grupos y bandas ahora algo más dispersas de atacantes y defensores luchando entre si en diferentes calles.

Mientras en otros sectores grupos de individuos de gran poder tanto en el bando defensor como en el trasgoide se abría paso masacrando enemigos en diferentes calles y callejuelas, Eliandor, Aramil y los ents se convirtieron en una de dichas bandas que comenzaron a ir buscando grupos trasgoides a los que enfrentarse y aplastar por diversas calles cada vez más alejadas de la sellada puerta interior tras haber conseguido defender esta con éxito y quedándose los guardias supervivientes vigilando el lugar.

Pasaron horas y horas sin descanso de corretear por calles eliminando sin parar trasgoides dispersos, corpúsculos de bandas organizadas y algunos focos poderosos en los barrios aldeaños de los alrededores haciendo que la pareja consiguiera convertirse en uno de esos grupos que iban marcando una diferencia en esa parte estancada de la batalla. Tras uso y agotamiento de varas, varitas, pergaminos, gemas, conjuros por parte del arcano elfo… y recibir múltiples heridas casi mortales, ataques pseudo-epilépticos de hacer de forma incontrolable escupir repetidas blasfemias por parte del luchador elfo… e inagotables horas de absoluta agonía matando con cada vez más dificultad y menos recursos más trasgoides de poder aislados y pequeños grupos… con dos grupos diferentes de ents totalmente reducidos a leña y astillas.. el dueto consiguió medio día después arrastrarse de vuelta al portón interior sellado y caer rendidos pero vivos al suelo.

En ese punto de la batalla tras un día entero de lucha la horda secundaria trasgoide, viendo que además de no tomar la ciudad ahora seguiría perdiendo números en vano, tocó la retirada con el sonido de numerosos cuernos. La mayoría de trasgoides que ocupaban numerosos barrios exteriores de la ciudad salieron en grupos físicamente o a través de extraños poderes de huída, con sus chamanes resguardando la retirada. Pese a todo numerosos rezagados quedaron llenando la ciudad y tomó un día entero más a los supervivientes para ir peinando los focos de resistencia restantes.

Terminadas las postrimerías de dos días seguidos de batalla sin descanso Eliandor y Aramil se pusieron en la triste y tenebrosa búsqueda de sus compañeros de aventuras desaparecidos. Nunca se encontró rastro alguno de Isendur y este terminó como muchísimos otros defensores... muerto y desaparecido, posiblemente troceado y devorado por los trasgoides aunque hubo algo de más suerte con Elenvar. Sus restos se encontraban en un estrecho callejón muy cercano a donde desapareció. Su cadáver había sido totalmente saqueado, no quedaba ni siquiera su ropa interior, además el cuerpo estaba seccionado en varios pedazos diferentes, le faltaban partes corporales como los dedos y las orejas y algo o alguien había devorado su rostro. Sin embargo uno de los escasos y poderosos pergaminos de resurreción de alta esfera al conjunto de pedazos reunidos fue suficiente para que la poderosa aura positiva de energía pudiera recomponer los restos y traerlo a la vida.

Un proceso similar pero a menor escala de poder con el uso de pociones, pergaminos y rezos curativos se llevó a cabo por todo el anillo interior de la ciudad por parte de los templos y clérigos disponibles, recibiendo curaciones los soldados malheridos o moribundos y numerosos cantos, misas y rezos de bendiciones fueron realizados en un aliento de tristeza y consuelo a lo que a lo mejor era una de las últimas veces que podría descansarse en la urbe.

La ciudad seguía en pie de momento durante unos días más y parecía que tendría que ser la horda principal norte del Iluminado la que directamente tuviera que encargarse de arrasar el lugar y derribar la urbe sin dejar piedra sobre piedra. Esto daba un valioso margen extra a otras gentes y regiones que ganaban también algo más de tiempo mientras una de las hordas principales tenía que dedicarse a arrasar directamente la ciudad de humanos y elfos. El precio a pagar por ganar este retraso a las hordas era de momento algo más de una tercera parte de todos sus defensores muertos, armas de asedio de la muralla exterior destruida, la mitad de los barrios exteriores quemados e incinerados y un cansancio acumulado notorio en sus defensores restantes. Pero la ciudad de momento aún seguía en pie con orgullo y desafío ante lo que estaba por venir.

Entre tanto un nuevo grave problema surgía, apenas justo al acabar la batalla las terribles nuevas sobre la inminente plaga de aberraciones llegó hasta las autoridades de la ciudad. Cuando se supo que entre los refugiados habían posiblemente infectados que portaban decenas de posibles futuras aberraciones a modo de huevos fusionados en sus cuerpos.. y siendo Bayas-Rathu la ciudad que de lejos había tenido que dar cabida a más refugiados de todas las ciudades del Reino… junto a la masificación de TODOS los civiles, residentes y refugiados en el anillo interior de la ciudad... la alarma saltó y durisimas decisiones tuvieron que tomarse de inmediato en la sitiada y cercada ciudad. Con la ciudad en guerra, sin tiempo, ante la posibilidad de un posible masacre entre las apiñadas gentes en el círculo interior de las murallas y dada la emergencia del momento no habría forma de que hubiera resultados felices a esta situación.

El Archi-Duque Tlaes, conocido como el Verdugo del Reino, antiguo puño derecho del difunto Rey de Rockham, tomó la decisión de hacerse responsable de encargarse de este problema para ser el quien tuviera que mancharse las manos. El mismo en persona dedicaría estos días solo a este problema mientras la Casa Gonsadel seguía organizando las defensas de la ciudad. El Verdugo estaba inicialmente dispuesto y resignado a tener que exterminar a los miles de refugiados si hiciera falta, este sin embargo solicitó de capacidades arcanas para intentar diferenciar a aquellos que estuvieran contaminados de los que no de entre los refugiados. Al parecer la Archimaga de Bayas mencionó que el Arcano Eliandor disponía de recursos de detección específicos contra abominaciones por lo que el Archi-Duque de inmediato en los pocos días que hubo de tranquilidad tras la última batalla, dio órdenes directas de disponer del mago para que este dejara de lado otras tareas y se centrara solamente en ayudar al Verdugo a reunir y analizar en grupos quienes estaban mancillados como portadores de aberraciones.

Con un clima de cielos ahora nublados y leves lloviznas se tomaron varios días y lanzamiento de repetidos conjuros de detección por parte de varios arcanos que recibieron copias de pergaminos de ciertos conjuros específicos donados por el Heroe Eliandor con el apoyo de la Iglesia de Wee-Jaas que trabajó junto al arcano elfo para complementar con rezos de curación menor allá donde no llegaban más los conjuros diarios de detección. De los miles de refugiados se revelaron más de 400 portadores.. a los cuales se apartaron y el Duque les dejó una terrible elección. No importaron las súplicas ya que había muy poco tiempo y la ciudad volvería a ser atacada e invadida en cualquier momento. Aquellos que quisieran un fin rápido y casi indoloro el Duque se encargaría personalmente uno a uno de forma individual por su veloz y mortifera mano en un lugar apartado y privado. Se dice que la mayoría de los infectados escogieron esta opción. Sin embargo tambien se co se rumoreó que aquellos menos valientes que no desearon ese rápido fin fueron enviados y exiliados a un hospicio, ahora vacío, del anillo exterior del cual el Archi-Duque había oído recientemente de sus conversaciones con el Héroe Eliandor. En ese lugar se les entregó raciones de agua, comida y armas a cada uno de los afectados. Una vez entraron al hospicio este fue poco después totalmente tapiado tanto ventanas como puertas como otros accesos con ladrillo. Se dice que el grupo al completo de la Orden de las Manos de Mayaheine que cuidaban antes del hospicio de forma muy empecinada decidieron dar sus vidas y ser sellados con los afectados en un sacrificio final para alentar y aliviar el sufrimiento de estos en sus últimas horas. Los templos de la ciudad rezaron por los muertos y fallecidos de esos días y se les incluyeron en las listas de bajas de la guerra como honor final a estas pobres gentes. Los siervos de Mayaheine se convirtieron en mártires y en un símbolo de dureza y resistencia de la ciudad. Mientras tanto mas subseres bogunes aparecieron por la ciudad intentando dar consuelo a nuevos huérfanos y familias desoladas.

AUGUSTO – EL ASEDIO SE ENDURECE



Mientras al norte Bayas-Rathu sobrevivía con uñas y con dientes apenas por los pelos y al sur se producían terribles masacres y malos augurios, la ciudad búnker de Augusto era el único enclave del Reino que quedaba en pie entre las dos regiones. Pese a que numerosos restos de la III Legión estaba atrincherada en la ciudad defendida por riscos, acantilados, estrechos puentes, ingenios de asedio gnómicos y la tenacidad enana el paso de días y semanas no estaba siendo precisamente fácil para la ciudad.

Augusto fue atacada desde el principio con todo el peso completo de casi un tercio del total de la Horda del Iluminado y solo la dureza y buenas defensas del lugar habían conseguido crear una diferencia que la mantenía aún en pie. Los repetidos ataques aéreos de enjambres de dracos eran repelidos por las ballistas de repetición en los enclaves elevados, los lanzamientos de rocas masivas por parte de numerosas tribus de gigantes de las colinas y gigantes del fuego no llegaban a cruzar los abismos en muchas ocasiones y solían rebotar contra las duras murallas externas en las ocasiones que si cruzaban la larga distancia de tiro. Las masas de trasgoides que subían las rampas eran continuamente desbaratadas por los regimientos en formación defensiva de tortuga enana y rociadas con venenos y ácidos por parte de los lanza proyectiles gnómicos. Los túneles subterráneos trasgoides que formaban ya laberintos intrincados solían ser volados por los aires con los explosivos compuestos por la pólvora negra de la ciudad.

Sin embargo el asedio continuaba sin parar, sin descanso, sin final. El paso de días y semanas aún no cobraba mella en los duros defensores y sus superiores posiciones defensivas pero estaba claro que el lento y pequeño desgaste que la horda iba haciendo empezaba a irse poco a poco acumulando. La ciudad aguantaba pero la horda era lo suficientemente numerosa y poderosa como para aguantar también el asedio en una competición de desgaste y atrición. Estaba por verse que factores desequilibrarían la balanza de la lucha por la ciudad.

Cuando las noticias de la plaga de abominaciones oculta entre los refugiados llegó hasta las autoridades de la sitiada y sellada ciudad, estos no tuvieron muchas alternativas. No había espacio ni lugar donde hacer cuarentena lo cual se empeoró exponencialmente cuando las noticias de esto se filtraron a la población general. Casi hubo una revuelta en medio del asedio y la ciudad sufrió amargamente por ello.

La llegada en forma de cuervo del Héroe Relen aportó confirmación de las funestas noticias así como los medios de al menos distinguir a los infectados del resto, evitando un genocidio mayor.
Convencidos por los recursos del poderoso arcano Augusto no quiso jugarse su capacidad de poder defenderse del enemigo exterior si dejaba proseguir dicha situación de odios y enfrentamientos entre residentes y refugiados. Las autoridades dispusieron a los refugiados en grupos y tras ser inspeccionados tanto por Relen como por clérigos y hombres de medicinas que habían sido aleccionados por el arcano, las más de 200 personas que mostraban signos de infestación fueron, siguiendo recomendaciones del archimago, tristemente arrojados a las simas llenas de metal líquido hirviente de las herrerías inferiores de la ciudad. Los gritos y chillidos retumbaron unos estremecedores minutos por las cámaras inferiores de la ciudad.

Mientras tanto en el resto de la región las numerosas cordilleras y montañas bullían de miles y miles de trasgoides y monstruos de todo tipo que cada vez con más frecuencia se revelaban como partes de esta extraña horda de increíbles números y raras amalgamas de abominaciones. El mero hecho de conseguir no llegar ya siquiera a la ciudad de Augusto pero hacer algún tipo de mella en alguna parte de la región montañosa podría ser ya toda una epopeya de por si.

El CRUCE – LA REGION SIGUE LUCHANDO



Aunque la tenacidad de Bayas-Rathu sin duda ha salvado de momento al Cruce ya que la horda principal en el norte ha tenido que desviarse para erradicar dicha urbe primero, innumerables grupos menores de incursores y partidas de guerra siguen entrando por la región en una serie de enfrentameintos cada vez más numerosos y más sangrientos contra los siervos de Gurfang y los bárbaros de Kord.

Se habla de terribles enfrentamientos donde la rabia de los invasores es igualada o superada por el fervor hirviente de odio y furia de los defensores. Los macabros relatos hablan no solo de asesinatos y violaciones por parte de los invasores sino de cosas aún peores si algo así es posible… por el otro lado se habla de humanos y transformados usando cráneos cortados de trasgoide como nuevos jarros de cerveza, huesecillos de las falanges de los dedos para juegos infantiles de azar, el uso de vértebras como sonajeros para los bebes, o fémures y caderas como martillos y tambores hablan sobre la ferocidad y los niveles de violencia desatados que están ocurriendo por la región. Se dice que los encuentros entre bandas trasgoides y manadas de bárbaros son ahora tan frecuentes que no hay prado o campo sin marcas de batalla aunque ambos bandos parecen bastante expertos en recoger y no malgastar ni un solo cadáver.

La región que los refugiados habían totalmente evitado no mostró casos conocidos de aparición de abominaciones y de haberlas seguramente a estas alturas han sido ya cazados y eliminados por los bárbaros de Kord y de Gurfang.

KLENTH – SE DESATA LA PLAGA EN LA REGIÓN ANTES DEL AVISO



En la única región que no ha había sufrido realmente el último conflicto parecen sucederse extraños y macabros portentos por parte de los numerosos refugiados que durante meses atrás habían huido de la guerra y se habían esparcido por todo el territorio. Se dice que antes de la llegada de las noticias la extraña plaga de abominaciones comenzó a desatarse entre los campamentos de refugiados que previamente habían conseguido entrar en la región antes de que la nobleza ordenara sellar las fronteras del Ducado apenas hace una semana. Numerosas pequeñas y grandes criaturas mutadas de tentáculos, dientes y ferocidad han surgido de campos y bosques donde antes se ocultaban pequeños grupos de refugiados para salir a cazar y devorar gente.

Las tropas de reserva que quedaban vigilantes en el Ducado parecen haberse movilizado completamente en cuanto se recibieron los avisos e informaciones desde otras partes de la península y se han concentrado en dar caza y erradicación a estos seres mutados de gran tamaño, además de erradicar los focos de infección de pequeñas abominaciones que han surgido entre varios grupos de refugiados. Se dice que algunos fanáticos de la Triada han traído de vuelta viejas costumbres y tanto abominaciones como refugiados acusados de estar relacionados con ellos han empezado a ser cercados y quemados en grandes piras en interior de casas, edificios o simples tiendas de los caminos.

Por el Ducado empieza a agolparse numerosas humaredas de campos de refugiados enteros quemados por miedo a posibles brotes sin siquiera ser estos confirmados y numerosos cadáveres chamuscados de abominaciones van siendo tirados a fosas comunes junto a cadáveres de culpables e inocentes conforme las PURGAS van sucediendo por la región.

Irónicamente el caos, el conflicto y los genocidios están ahora dándose en la región que no había sido muy afectada por los conflictos anteriores en el Reino.

RYM – ADOPTANDO LAS ABERRACIONES



De una forma similar en Klenth, las masas de refugiados de Rym empiezan a tener brotes de aparición de criaturas aberrantes. Esto ocurre sobre todo en la costa donde más refugiados se habían concentrado. Sin embargo extrañamente la reacción de las autoridades locales parece mucho mas laxa y tranquila que la de sus vecinos al norte.

Masas de feligreses del culto de Xhumiramáxima ha abordado estos lugares infestados usando la fuerza para contener o matar a estos seres pero también a la vez capturando cuerpos de gentes infectadas. Se rumorea que es posible que debido a las extrañas interpretaciones de las tablillas el culto pueda creer que las abominaciones son seres bendecidos-marcados por Theia y que simplemente deben ser salvadas y sacadas de sus crianzas artificiales y aceleradas.

Mientras tanto pareciera ser que las extrañas luces en la noche en lo alto de las montañas al oeste de Rym parecieran estar poco a poco disminuyendo hasta finalmente desaparecer unas pocas noches después de estos eventos, nadie sabe como aparecieron o desaparecieron de igual misteriosa forma pero si se sabe que el numero de incursones por parte de trasgoides en la región ha disminuido radicalmente.

Como punto de gran importancia se dice que la mismísima Madre de la Disonancia, la aberrante archidruida de rango Anciana Xhumira, ha hecho nueva aparición en la ciudad para dar guía, palabras, sueños proféticos, rituales y pruebas de tocar una gema verde a los suyos por toda la ciudad. Aunque son solo rumores se cree que dicha aparición podría tener relación con la casi desaparición de trasgoides incursores por la región o incluso en como se ha evitado una multiplicación descontrolada de aberraciones por la región. Lo que si se sabe es que los siervos de Theia y Yondala han ofrecido a la mismísima Xhumira como regalo una serie de huevos casi a punto de eclosionar recogidos de algunos cuerpos infectados.

LUAL-RHUS – DISMINUYEN LAS INCURSIONES, LA REGION ENVIA AYUDA



Debido a los eventos de ataque directo a las masas trasgoides en la región de Lual-Thyr y la intervención de las fuerzas de la Ultima Marcha durante varios días por las campiñas y regiones rurales de la región contra partidas e incursiones trasgoides, las actividades de estos parecen haber disminuido en gran medida aunque no hayan desaparecido totalmente. Sin embargo pese a que los ataques trasgoides en la región son ahora aislados se ha reportado algunos casos de brotes de pequeños grupos de abominaciones por la región.

Por fortuna a la región no habían acudido demasiados refugiados aún por lo que los casos que se han dado por la zona de aparición de aberraciones es relativamente bajo. Por ello pese a que una parte de los escasos números de defensores de la región se mantendrán en el lugar para tratar con esos pequeños grupos de trasgoides y aberraciones, se ha decidido finalmente el poder enviar algunos escasos cientos de soldados de las reservas de la guardia de la ciudad y de tropas mercenarias de algunas familias nobles locales.

Dichos refuerzos han marchado directamente por las ahora más despejada región y se han unido directamente a las columnas de milicianos y soldados de voluntarios de la Ultima Marcha, reponiendo sus bajas anteriores e incluso aumentando levemente sus números iniciales.

Descanso y papeo (8 Horas)
No es desconocido la mania que tiene Zhurik de llevar practicamente un Mercadona en una de sus bolsas de contencion magica, de la cual siempre tiene petada de todo tipo de viveres (si... eso parece el puto bolsillo de doraemon) Dejaría la mayoria de estos viveres (comida, agua, hay de too en ese puto bolsillo magico), solo llevandose consigo lo justo y necesario,[raciones para una semana de papeo y agua]) El resto de comida, incluido el alcohol y/o comidas copiosas y caras la deja en el campamento.
No pierde el tiempo, descansa y mantiene su equipo listo al día, revisando que esta todo en condiciones. Luego a sobar en algun puto barracón. Aun así junto con Krisleth, Benancio, Alant y Aldo, avisará de dormir por turnos, para que uno o dos siempre se queden despiertos, por si acaso...